La violencia de género en línea puede producir diversos efectos tanto a nivel personal como social. Personal en cuanto a las afectaciones físicas y psíquicas que inciden en la vida de la persona que padece la violencia; y social en cuanto puede provocar que las mujeres se autocensuren y se abstengan de hablar libremente. Como consecuencia, hay una restricción de la capacidad de presencia y de ser parte de los diversos movimientos y comunidades de activismo. En otras palabras, estas situaciones limitan el grado de participación de las mujeres en debates de interés público, proceso de toma de decisiones, y perpetúa la manera en la que se construyen los espacios de ciudadanía digital: en base a la exclusión de las mujeres y otros grupos minoritarios. Existen varias dimensiones para analizar las consecuencias e impactos para las víctimas de violencia digital:
Impacto físico
- Sudoración.
- Dolor de distintas partes del cuerpo (cabeza, espalda, estómago).
- Pérdida o exceso de apetito.
- Tensión.
- Llanto.
- Angustia.
Impacto emocional
- Estrés.
- Angustia.
- Ira.
- Enojo.
- Miedo.
- Impotencia.
- Frustración.
- Depresión.
- Paranoia .
- Cansancio.
- Confusión.
Impactos varios
- Temor a salir y exponerse.
- Auto-limitación de movilidad.
- Abandono de uso de las tecnologías.
- Autocensura.
- Sensación de constante monitoreo y vigilancia.
LA VIOLENCIA DE GÉNERO FACILITADA POR LA TECNOLOGÍA ES REAL SEA EN LÍNEA O FUERA DE LÍNEA LA VIOLENCIA ES UNA EL IMPACTO EL MISMO